Con la consagración de Juan Luis Guerra, que se impuso en el rubro Álbum del Año, por su disco Radio Güira, terminó en la madrugada del viernes (hora de la Argentina), la 25° edición de los Latin Grammy. La gala central de los premios había comenzado a las 22 en punto, para celebrar su 25° aniversario. Tuvo shows para todos los gustos y durante esas tres horas se fueron conociendo a los ganadores de las categorías principales.
Como no podía ser de otro modo, la figura del año elegida para 2024 por los Latin Grammy, Carlos Vives, fue el encargado de abrir el escenario del Kaseya Center de Miami, con un popurrí que saltó de una época a otra de su trayectoria de más de tres décadas, desde que se consagró como renovador del vallenato. “Fruta fresca”, “La bicicleta”, “Tierra del olvido”, “Volví a nacer”, “Robarte un beso” y su primer hit internacional, “Pa’Mayte”, fueron de la partida. Terminó rodeado de una tropa de famosos colombianos, esa cantera que, desde finales del siglo pasado, dio artistas del rock y el pop en español que se hicieron mundialmente famosos, como Camilo y Juanes.
“Hace 25 años todos sabíamos que la música latina era tan grande que necesitaba su propio espacio”, decían Andy García y Gloria Estefan, quienes estuvieron en aquella primera edición latina y que fueron convocados para la apertura de ésta, de las Bodas de Plata. Un instante después, Ela Taubert y el Jonas Brothers Joe Jonas abordaron el escenario para compartir “No sé cómo pasó”, primer musical de una larga lista, que se extendió hasta develar al ganador del Mejor álbum de esta edición.
Como cada año, hubo una ceremonia previa, donde se repartieron estatuillas de 49 de los 58 rubros en competencia. Al productor Edgar Barrera -que llegó como favorito de esta edición, con nueve nominaciones- aunque no sea una de las caras más conocidas para el público, la industria de la música lo condecoró con los gramófonos de dos categorías bien prestigiosas: Compositor del año y Productor del año.
Por el lado argentino, fueron varios los artistas que se impusieron en las categorías en las que resultaron nominados. Nathy Peluso, por Grasa se quedó con la estatuilla de Video musical versión larga; y por el tema “El día que perdí mi juventud”, con la de Mejor canción alternativa (”El arte se trata de eso, de poner el corazón, de poner la fe y de entregarse”, dijo en su primera aparición sobre el escenario). Bizarrap se impuso en la categoría Mejor interpretación electrónica de música latina, por el remix que Tiësto hizo para el último álbum de Shakira, de la BZRP Music Sessions Vol. 53 ( “Está bueno esto, porque yo conocí la música electrónica gracias a Tiësto, cuando tenía 6 o 7 años”, dijo el Biza). El Quinteto del pianista Diego Schissi ganó en Mejor álbum de tango, por Apiazolado. En la terna Mejor canción de pop/rock, se impusieron Conociendo Rusia y Natalia Laforucade, por su colaboración en “5 horas menos”.
Trueno se quedó con el premio de la categoría Mejor Fusión/interpretación Urbana, por “Tranky Funky”, aunque no pudo entrar a la Premiere para recibirlo. Había sufrido un problema en la puerta del recito y lo explicó en sus redes. “Acá, el primer artista en ganar un Grammy sin entrar a los premios, tomando un mate acá en la puerta. No me dejan entrar, pero ganamos”.
Soledad Pastorutti ganó por el disco Raíz, que grabó con Lila Downs y Niña Pastori, en la segunda incursión que han hecho como trío de expansión latinoamericana. La producción competía en el rubro Mejor álbum folklórico.
Si bien la camada argentina de este año no tuvo participación en lo que se consideran “categorías principales”, como Álbum o Grabación del año y Nuevo artista, la mayoría de los participantes se impusieron en las ternas para las que habían sido convocados. La Sole, además, tuvo una distinción especial de los premios. Antes de estas ceremonias fue homenajeada en un evento especial en el Frost Museum de Miami, donde recibió una medalla en reconocimiento a su extensa y exitosa trayectoria musical. Luis Dousdebes, Director Ejecutivo de los Latin Grammy, subrayó “la contribución de Soledad a la música folclórica y su papel en la promoción de la cultura argentina a nivel global”.
Por otra parte, la semana comenzó la distinción a los elegidos cada año con los premios a la “excelencia”. Alejandro Lerner se destacó entre un grupo donde también estaban Los Ángeles Azules, Albita, Lolita Flores, Ángel ‘Cucco’ Peña, Chucho Rincón, Draco Rosa y Lulu Santos.
Noche de duetos y enganchados
Si el “feat” es la fórmula más marketinera de la industria de la música en lo que va de este siglo, una entrega de premios no puede ser excepción si quiere ser vidriera de lo que sucede un año tras otro. La fiesta principal de los Latin Grammy es, básicamente, un gran desfile de shows.
Bon Jovi (el invitado “angloparlante” que nunca puede faltar) cantó con Pitbull “It’s My Life”, rebautizada como “Now or Never”. DJ Khaled hizo dupla con Eladio Carrión y luego con el español Quevedo. Con toque muy mariachi, Edgar Barrera reunió Angela, Becky G y Leonardo Aguilar. Y lo que no se podía hacer en feat, se enganchaba, como hacían los “Disc-jockeys” hace cuatro décadas (y más también). Trueno, que venía ya con un pequeño gramófono bajo el brazo, fue parte de ese enganchado con el venezolano Danny Ocean y el portorriqueño Álvaro Díaz. A su turno interpretaron “Amor”, “Quién te quiere como el nene” y “Tranky Funky” que es la carta de la suerte del embajador del Barrio de la Boca.
La secuencia se repitió, con enganchados femeninos, sin cruzarse sobre el escenario: Kali Uchis (con ese bolero, en versión medio lisérgica, llamado “Te mata”), Elena Rose (“Caracas en el 2000″) y la entrerriana Emilia Mernes (”No se ve”).
En otros tramos, Juan Luis Guerra dijo presente con todo el peso de su talento y un rato después hubo un potentísimo tributo a la salsa, encabezado por estrellas como India y Marc Anthony, y un homenaje a viejas glorias de la canción latinoamericana, Juan Gabriel, José José y Vicente Fernández.
Fue una gala con despliegue, pero sin sobreabundancia ni mayores sorpresas visuales. Incluso, a veces los sets intimistas pudieron ser más efectivos que los pirotécnicos. El momento en que Anitta & Tiago (solo con guitarra y voz) tuvieron para honrar a Sergio Mendes, ese gran embajador musical del Brasil, fallecido hace unos meses, fue uno de los momentos artísticos más simples y certeros de la noche.
Entre los tramos emotivos (no cantados), Vives salió a recibir su premio de “Persona del año” con gran evocación: “Y sigo siendo un niño de Santa Marta y un joven de Bogotá”, dijo. Luego aseguró que Colombia es un país de cruces de caminos musicales y que encontró su rocanrol en sus raíces. “Significa que la música no tiene fronteras. Como los árboles, aún con nuestras diferencias, estamos todos conectados en estas raíces. Sigo creyendo que en la música están las ideas para poder vivir unidos en la diversidad”.
Excepto en los discursos de agradecimiento de premios, las ceremonias de los Latin Grammy suelen ser, como la mayoría de las premiaciones, eventos muy estructurados y detalladamente guionados. En pocas ocasiones se puede salir del libreto. Alejandro Sanz, que tiene trayectoria donde respaldarse para hacerlo (y que en 2017 estuvo en el lugar donde este año estuvo Vives), pidió antes de ponerse en rol de presentador: “Aplausos solidarios para nuestra gente en España. Sabemos que están pasando unos días terribles, pero no les vamos a soltar. Para ustedes va este show”, dijo el cantante español.
Esos breves momentos de improvisación le dieron fluidez a la premiación. De hecho, el teleprompter de donde debía leer los libretos, fue la pesadilla de muchos que no lo tuvieron a buen tiro de vista. Cosas que pasan, incluso hasta en las mega producciones.
Álbum del Año: Radio Güira, Juan Luis Guerra
Compositor del año: Édgar Barrera
Canción del Año: “Derrumbe”, Jorge Drexler
Grabación del Año: “Mambo 23″, Juan Luis Guerra
Nuevo Artista: Ela Taubert
Mejor Álbum Vocal Pop: El viaje, Luis Fonsi.
Mejor álbum vocal pop tradicional: García, Kany García
Mejor álbum de música alternativa: Autopoiética, Mon Laferte
Mejor Ingeniería de grabación para un Álbum: Jota.Pê
Mejor Canción de Pop/Rock: Conociendo Rusia Feat. Natalia Lafourcade
Mejor álbum vocal pop tradicional: García, Kany García
Mejor Álbum Pop/Rock: Reflejos de lo eterno, Draco Rosa
Mejor Álbum de Música Urbana: Mañana será bonito, Karol G
Mejor Canción de Rock: Jesús Quintero & Draco Rosa
Mejor Canción Cantautor: Jorge Drexler y Kany García
Mejor álbum de tango: Apiazolado, Diego Schissi Quinteto
Mejor Álbum de Merengue y/o Bachata: Radio Güira, Juan Luis Guerra y 4.40
Mejor Canción de Pop/Rock: Feriado, Rawayana
Mejor Canción Alternativa: El día que perdía mi juventud, Nathy Peluso
Mejor Video Musical Versión Corta: Residente
Mejor Álbum de Pop Contemporáneo en Lengua Portuguesa: Os Garotin de São Gonçalo, Os Garotin
Mejor Álbum de Música Sertaneja: Boiadeira Internacional, Ana Castela
Mejor Canción en Lengua Portuguesa: “Ouro Marrom”, Jota.Pê
Mejor composición clásica contemporánea (premio a compositores): Fandango, de Arturo Márques
Mejor Álbum de Música Clásica: Fandango, Anne Akiko Meyers y Gustavo Castillo
Mejor álbum de jazz latino: Pra vocé Ilza, Hermetto Pascual y Grupo
Mejor Álbum de Música Ranchera/Mariachi: Te llevo en la sangre, Alejandro Fernández
Mejor Álbum de Música Tejana: Imperfecto, El Plan
Mejor álbum de música norteña: El comienzo, Grupo Frontera
Mejor Canción Regional Mexicana: El amor de su vida, Edgar Barrera & Kevyn Mauricio Cruz
Mejor Álbum de Música Mexicana Contemporánea: Boca Chueca, Carin León
Mejor Álbum Cantautor: Pausa, Leonel García
Mejor Álbum Cristiano (En Español): Kintsugi Un Corazón
Mejor Álbum de Música Banda: Diamantes, Chiquis
Mejor Álbum de Música Latina Para Niños: A cantar de Danilo & Chapis
Mejor Arreglo: Night in tunisia, Hilario Durán
Mejor Interpretación de Música Electrónica Latina: Bzrp Music Sessions, Vol. 53 (Tiësto Remix), Bizarrap y Shakira
Mejor Interpretación Urbana en Lengua Portuguesa: Cachimbo da paz de Gabriel O Pensador, Lulu Santos, Xamã
Mejor canción urbana : Bonita, Daddy Yankee
Mejor Video Musical Versión Larga: Grasa, Nathy Peluso
Mejor Álbum Instrumental: Tembla, Hamilton de Holanda & C4 Trío
Mejor Álbum de Música Cristiana (en lengua portuguesa): Deixa Vir Vol. 2 (ao vivo), Thalles Roberto
Mejor álbum de música de raíces en lengua portuguesa: Mariana Aydar & Mestrinho, Mariana e Mestrinho
Mejor Álbum Música Popular/Música Afro-Portuguesa Brasileira: Seo Meu Fosse o Mundo, Jota.Pê
Mejor álbum de cumbia vallenato: Ta Malo, Silvestre Dangond.
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