A partir de este martes, la empresa LATAM Airlines quedó autorizada por el Gobierno de Javier Milei para retomar la ruta entre Buenos Aires y Miami sin escalas, con salidas desde el aeropuerto de Ezeiza, en el marco de un puente aéreo que comienza en Santiago de Chile y viceversa.
La decisión que le permite a la aerolínea de bandera chilena explotar los servicios regulares de transporte aéreo de pasajeros y cargas desde la provincia de Buenos Aires fue oficializada a través de la Disposición 23/2025 de la Subsecretaría de Transporte Aéreo, publicada en el Boletín Oficial este lunes bajo la misma del titular de organismo, Hernán Adrián Gómez.
“La operatoria propuesta se encuentra contemplada en el marco bilateral que rige las relaciones aerocomerciales entre ambos países”, se indicó en los considerandos de la medida y se aclaró que “el transportador ha sido oportunamente designado por la autoridad aeronáutica de su país, de conformidad con lo dispuesto a nivel bilateral, para efectuar servicios regulares y no regulares hacia nuestro territorio”.
Desde la Subsecretaría de Transporte Aéreo también se detalló que “la empresa acreditó los recaudos legales y administrativos exigidos por la normativa vigente para prestar los servicios requeridos”, por lo que “resulta necesario dictar la norma administrativa que otorgue los servicios solicitados”.
La aerolínea chilena expresó su voluntad de retomar la ruta sin escalas a través de un comunicado lanzado en marzo de este año, en el marco de la política de “cielos abiertos” presentada por el gobierno libertario.
La aerolínea que aterrizó en Córdoba hace 18 años, sigue creciendo y desde enero cubrirá 21 frecuencias semanales
“LATAM Airlines Group S.A. tiene intención de operar un nuevo vuelo diario en la ruta Santiago de Chile-Buenos Aires-Miami, en quintas libertades conforme los acuerdos bilaterales vigentes, sujeto a presentaciones y aprobaciones gubernamentales”, manifestó la compañía.
La empresa sostuvo que la potencial nueva ruta se esperaba para fines de 2025, sin una fecha determinada, “trazando un nuevo puente entre Chile, Argentina y Estados Unidos”. El objetivo era que un avión con matrícula y tripulación extranjera, en este caso chilena, pueda aterrizar en el país y subir pasajeros locales que buscaran ir hacia un tercer destino, en este caso Miami, Estados Unidos.
Ya en mayo, se detalló que la nueva ruta proyectaba movilizar alrededor de 170 mil pasajeros anuales y que el vuelo sería operado por aviones Boeing 787-8 y 787-9 Dreamliner, con capacidad entre 271 asientos (20 Business /251 Economy) y 300 asientos (30 Business /270 Economy), respectivamente, y que estaría disponible desde el 1 de diciembre del presente año.
AS/LT